SANTA CATALINA Y EL RINCONCILLO, por Fátima Rosado de Rueda

Coincidiendo con la presentación de su libro «Historia de una taberna: El Rinconcillo» doña Fátima Rosado de Rueda, autora y hermana de nuestra corporación, ha realizado una pequeña síntesis en la que se entremezcla nuestro barrio, nuestra Hermandad y, cómo no, la más que centenaria Taberna de El Rinconcillo.

El libro se puede adquirir en la Botica de Lectores de Santa Catalina (C/ Almirante Apodaca, 23) .


SANTA CATALINA Y EL RINCONCILLO

La iglesia de Santa Catalina se encuentra en el corazón del barrio del mismo nombre. Es una de las primitivas iglesias mudéjares de Sevilla y junto a la de San Román conforman la parroquia del barrio. El ocho de septiembre de 1912 fue declarada Bien de Interés Cultural. El arquitecto municipal Juan Talavera realizó unas obras de consolidación en 1926. La portada exterior actual corresponde a la de la antigua iglesia de Santa Lucía del siglo XIV; fue colocada en el nuevo nártex dando paso a la primitiva puerta del templo.

Santa Catalina acoge varias hermandades: la Hermandad Sacramental de la Exaltación, la del Carmen y del Rosario, y la de Santa Lucía.

Hay indicios para defender que la Hermandad de la Exaltación ya existiera como cofradía desde finales del siglo XVI. En el archivo de dicha corporación encontramos una anotación que dice así: año de 1595 estubo esta cofradía en San Roque y antes estubo en San Benito. Según la tradición es posible que fuese fundada en el antiguo monasterio de San Benito como otras hermandades. Desde principios del siglo XVII tiene su sede en Santa Catalina. En el Archivo Arzobispal de la ciudad queda constancia que desde principios de dicho siglo procesionaba en la celebración del Corpus Christi de Sevilla. En 1964 la Hermandad de la Exaltación y la Sacramental de Santa Catalina se fusionan para comenzar juntas una nueva etapa.

La taberna El Rinconcillo se encuentra a pocos metros de la iglesia. En 2020 se celebró el 350 aniversario de su fundación. Esto hace pensar que desde hace siglos ha debido existir una posible relación, ya que al encontrarse tan cerca es muy posible que algunos parroquianos literales de la iglesia y también de la hermandad frecuentaran la taberna desde sus inicios. Incluso podemos suponer que Leonardo de Figueroa, quien realizó la ejecución de la capilla Sacramental de la iglesia, visitara la taberna al terminar su jornada. Evidentemente no lo sabemos, de momento no hay constancia documental, pero podría ser posible. Con lo que sí contamos en el archivo de la hermandad es con una memoria de alcancías de 1748 en la que se recogen los donativos de varios comercios de la zona recaudados por la hermandad Sacramental, siendo uno de ellos una taberna que se hallaba junto a una pastelería, y es que, en un padrón del barrio realizado en 1705, cerca de la iglesia, en la calle Sardinas (actual Gerona), existía una taberna junto a una pastelería, y es posible que se tratase de El Rinconcillo.

Actualmente El Rinconcillo mantiene una estrecha vinculación con Santa Catalina ya que algunos miembros de la familia de Rueda hemos sido bautizados en la misma iglesia, y también con la Hermandad de la Exaltación, así como portando la Cruz de Guía, acompañando a nuestros titulares en sus salidas procesionales, formando parte de la Junta de Gobierno, trabajando en el Archivo de la Hermandad. En los años cuarenta del siglo XX se celebró algún Cabildo de Hermanos en los salones de El Rinconcillo y actualmente se celebran reuniones y comidas de Hermandad.

La relación es de Hermandad, de vínculo estrecho, de cotidianidad, del día a día, es personal y muy afectiva. El Rinconcillo tiene la fortuna de vincularse a una de las Hermandades más antiguas de la ciudad y de encontrarse cerca de una de las iglesias mudéjares más representativas de la misma. Es nuestro deseo seguir vinculados por muchos años más.

Fátima Rosado de Rueda.